Desde distintos sectores sindicales y hasta dentro del propio partido de gobierno son cada vez más las críticas orientadas a los funcionarios encargados de manejar esos organismos.
Se les cuestiona algunos manejos pocos claros en designaciones y nombramientos, así como vínculos que serían al menos confusos con empresas privadas del sector al que deben regular.

Desde distintos sectores sindicales y hasta dentro del propio partido de gobierno son cada vez más las críticas orientadas a los funcionarios encargados de manejar esos organismos.
Se les cuestiona algunos manejos pocos claros en designaciones y nombramientos, así como vínculos que serían al menos confusos con empresas privadas del sector al que deben regular.
A Agustín Rodríguez Grellet, número 1 de la Empresa Argentina de Navegación Aérea Sociedad del Estado (EANA)se le reprocha desde sectores oficialistas ser ¨un militante K disfrazado¨, más interesado en mantener ciertos acuerdos comerciales que en cumplir las directivas del presidente de la Nación, Mauricio Macri, en ese área.
Se le apunta, en particular, haber pertenecido al staff de la primera gestión de la ANAC kirchnerista junto a Hernán Ruggiroli,y luego pasar a integrar el equipo Martín Rodríguez Baladrón que acompañó al ex ministro Florencio Randazzo en el Ministerio de Transporte.
Algunos de los nombrados figuran en causas judiciales por haber otorgado la autorización para volar a la empresa Just Flight SA, que con el nombre de fantasía Royal Class pertenecía a Lázaro Báez y operaba desde San Fernando con vuelos más que sospechados hacia Uruguay.
Respecto a los nombramientos, afirman las voces críticas, no se respeta ningún mecanismo recomendado para la administración pública y por el contrario se recurre a amigos, conocidos, o socios en el ámbito privado, que en algunos casos ya desempeñaron cargos dentro del organismo con gobiernos anteriores.
Sobre la ANAC las críticas son similares y se le suma que con la llegada de nuevas empresas interesadas en el mercado de bajo costo se producen situaciones al menos cuestionables desde el punto de vista ético con ¨sutiles sugerencias¨ para que los trámites y autorizaciones ante el organismo los realice un ex suboficial de la Fuerza Aérea como parte de un estudio privado.
Estos temas ya llegaron a oídos de importantes funcionarios del gobierno y no se descarta que haya novedades en las próximas semanas.